Las mujeres alcanzan a los hombres en emprendimiento pese a la tradicional disparidad en el ámbito laboral entre mujeres y hombres y las trabas que se encuentran las últimas para acceder a los puestos de dirección, un estudio de la empresa Amway revela que no existen prácticamente diferencias entre hombres y mujeres en su predisposición a emprender nuevos negocios.
Entre las mujeres, que cada día avanzan más en las conquistas en el mundo laboral y el espacio público, existe una actitud «bastante abierta y positiva ante el emprendimiento», según el responsable de la realización de este estudio entre más de 500 españolas.
El objetivo era conocer la opinión y percepción de las mujeres sobre el emprendimiento, así como las barreras o factores que les incentiva a no emprender.
Este análisis muestra que el 60 % de las españolas confía en el autoempleo e, incluso, una tercera parte de ellas se visualiza creando su propio negocio. Aunque las españolas muestran una actitud mayoritariamente positiva ante la idea de emprender, aún están por debajo de la media internacional un 68%, según los datos que Amway publica .Las más reticentes al autoempleo en el panorama internacional son las mujeres húngaras (50%), las austríacas (53%) y las americanas (55%). En el lado contrario se encuentran las mujeres de Dinamarca, donde el 89% se muestra favorable al emprendimiento, de Finlandia (86%) y de Australia (64%).
El estudio también muestra que las mujeres que son madres tienen una actitud más positiva ante la posibilidad de emprender (67%), mientras las mujeres sin hijos quedan por debajo de la media nacional (56%).
En ambos casos, la principal motivación para emprender es ser cada una su propia jefa y trabajar de forma independiente, seguido del sentimiento de autorrealización y el regreso al mercado laboral.
Además, el hecho de poder lograr una mayor conciliación entre la vida profesional y la personal es otra de las principales razones que impulsarían a las encuestadas a crear su propia empresa.
Algunos aspectos que contribuyen a incrementar este recelo son, sobre todo, el contexto de crisis económica (49%) y las cargas financieras (46%).Todo ello conlleva a que el 65% de las encuestadas considere que la sociedad española brinda un apoyo insuficiente a la actividad emprendedora, una perspectiva algo más negativa que la de los hombres españoles cuyo porcentaje corresponde al 63%.
Según la mujer española, la posibilidad de contar con mayores fondos públicos y ayudas para start-ups (55%), así como recibir formación acerca de técnicas y habilidades comerciales (34%), se alzan como las principales bazas para incentivar la creación de empresas y poner fin al desempleo.
